¡Hola! Mi nombre es Jessica. Antes de discutir mis pensamientos sobre mis primeros meses como maestra en Joyce, les voy a decir algunas cosas de mí.

Primero, nací en Quito, Ecuador (espero que todos seepan que es el país mas hermoso del mundo). Mis padres, quien son de Los Estados, me adoptaron el día que yo nací. En este momento empecé mi vida bilingüe. Para mis primeros años mi primera idioma fue el español, pero cuando mi familia visitaron a Los Estados, realicé que el resto de mi familia extendida no hablaban el español. Desde este momento hasta que tenía doce años, hablaba solamente en inglés. No quería ser diferente de mi familia estadounidense.

Finalmente, entendí que las diferencias no son algo de que tengo que estar avergonzada. Embarqué en tratar de aprender mi primer idioma de nuevo. No puedo decir que soy completamente capacitada en los dos idiomas, pero siguo practicando.

Ahora para hablar del tema — ser maestra, y los niños. Estamos en la mitad del segundo mes, y todos los niños estan acustumbrando a la rutina y a nosotros. Puedo ver avances con cada niño y niña. Algunos mejoran en sus letras, otros en entender otra idioma, otros en aprender como hacer amigos. Me anima ver el progreso de los estudiantes.

He tenido varias momentos favoritos en el primer mes de escuela. Cada vez que cantamos del pato y bailamos, cuando José contaron una historia de amigos con los peluches y todos los niños miraron y rieron de él, y cuando dos estudiantes cantaron “La Cucaracha” pero olvidaron las palabras (qué lindo)!

¡Hasta la próxima!

— Maestra Jessica